Profesiones del Futuro

El futuro, como todo aquello sin historia, se presenta colmado de interrogantes e inquietudes. No en vano a los visionarios se les llama reductores de incertidumbres, porque casi atrapan un mañana que para el lego es totalmente misterioso. En otros momentos, simplemente proyectamos el presente en línea recta, pensando que como ha sido hasta ahora será después, solo que mejorado y ojalá similar a lo visto o percibido.
Cuando eso acontece, creemos que la solución se encuentra en lo que el lema de los juegos olímpicos publicita: mas alto, mas fuerte, mas rápido. Así, si evocamos un vehículo lo deseamos mas veloz, resistente, a lo mejor mas inteligente; si una maquina, que fuere mas completa, rápida y productiva; y si nuestra casa, que los electrodomésticos se autodirijan; o las operaciones del hogar fuesen mas limpias, instantáneas, eficientes. Todo el tiempo mas y mas.
Pero el futuro no siempre se comporta de manera rectilínea. Si no, que hablen los inventores. Antes del computador, qué se le parecía? y a cual se asemejaba el internet? y el celular? y el Ipad?. Como dice Steve Jobs, "a la gente no le pregunto lo que quiere pues ellos no lo saben. Si me siguiera por sus creencias no se me ocurriría nada nuevo. Pero cuando examinan los inventos de Apple, dicen que siempre quisieron uno tal cual".
Igual pasa con profesiones y trabajos. Sabemos de sobra la descripción de cada puesto, trabajo o profesión familiar; tenemos certeza e incluso reflexionamos que siempre ha debido ser así. Pero nada nos pone en contacto con aquello no inventado sea porque el desarrollo tecnológico y económico no lo permitan, ya porque a nadie se le ha ocurrido lo obvio. Si bien la tecnología crea empleo, el desarrollo también; pero la observación y adaptabilidad del ser humano es lo que consigue mejorarlo.
Se cree que en la actualidad hay decenas de miles de profesiones, pero hace quinientos años se contaban con los dedos las existentes, muchas de ellas relacionadas directamente con la capacidad educativa de los individuos. Cuando no se tenía acceso a dicha formación los oficios eran de mínima complejidad, mas que todo manuales (siervos, labriegos, campesinos, labores caseras, herreros, peones, soldados, bodegueros, cazadores). A medida que la educación fue evolucionando lo hizo la proliferación de universidades con lo cual los oficios empezaron a incrementarse, primero en proporción aritmética y luego geométrica.
Otro mito a desterrar es que las nuevas profesiones se deriven únicamente de la tecnología y la verdad no lo es tanto. Si bien el desarrollo tecnológico es caldo de cultivo para infinidad de nuevas especialidades, es el progreso de la sociedad como conjunto el que genera labores que muchas veces no tienen relación directa sino indirecta con la tecnología. Ejemplos de hoy día: Cuidados para la tercera edad (resultante del envejecimiento poblacional, a su vez sub-producto de una mejor salud); comerciante electrónico (lo mismo que antes, pero igualmente distinto); sicólogo (pero del mundo de los sistemas y la informática); traductor (pero con conocimientos acordes al siglo XXI y a la globalización de la economía).
Una respuesta positiva ha sido encontrar nuevos usos para hechos antiguos. Y qué mejor ejemplo que el Circo du Soleil, emporio moderno de una de las profesiones mas antiguas cual es entretener (payasos, malabaristas y trapecistas incluídos), cambiando la esencia de la forma pero respetando el fondo, vendiendo un lugar mágico durante dos horas. O la radio satelital, donde se adapta el invento de hace cien años para un uso específico (noticias 24 horas, estado del tiempo; música de tu predilección; emisoras al gusto de cada cual); o el mismo planeador o el bumgee jumping (o salto al vacío unido a una cuerda elástica); o el paracaídas unido a un motor (otro anciano de un siglo), utilizado para transportar personas por placer y nunca para salir del peligro, origen real del invento.
Así seguirá por los siglos de los siglos, ya que la camada de invenciones, información y formas de comunicarse hará mas facil la llegada de novedosas profesiones, oficios y labores.
Un último punto son aquellas especialidades derivadas directamente de la tecnología, desconocidos totalmente hace diez o veinte años. Citemos algunos:
La Mecatrónica (estudio de los robots); Body Part Maker (fabricante de partes del cuerpo humano); Nanomédico (médico para implantes ultra-miniaturizados); Pharmer (mezcla de granjero e ingeniero genético); Guías turísticos espaciales (viajes fuera de la Tierra); Especialista en Cambio Climático; Profesor o Abogado virtual (nunca lo veremos cara a cara); Controlador de datos personales (experto en seguridad informática y criminología); Banquero de tiempo (organizador de información).; Personal Branders (experto en redes sociales y establecimiento de marcas). ¿Increíble? nada de eso; todos se están experimentando con sumo éxito. De manera que siempre debemos ver con optimismo el futuro aceptando sus límites.

Imposible negar que existe desempleo creciente pero las posibilidades de nuevas fuentes de trabajo, profesiones y habilidades están mas cerca de lo que pensamos. Con educación de calidad podremos acercarnos pero de la mano del espíritu comercial y aventurero que ninguna universidad, instituto, master o Ph.D. otorga.
Preguntemos a Steve Jobs (Apple), Bill Gates (Microsoft), Richard Branson (Virgin Air), Carlos Slim (Telmex), Guy Laliberté (Cirque de Soleil), Ingvar Kamprad (muebles Ikea) y Fredrik Idestam (Nokia). Ellos no estudiaron mayor cosa pero observaron, aprendieron y pusieron en práctica algo distinto.
Sin embargo, para los estudiosos y consagrados a la investigación también hay cabida: Larry Page y Sergey Brin (Google), Larry Ellison (Oracle), Michael Dell (Dell), Andy Grove (Intel), Akio Morita (Sony), Soichiro Honda (Honda), Ferdinand Porsche (autos Porsche). En suma, el talento y trabajo individual apoyado a veces en estudios; en otras, con un sentido autodidáctico de la vida.
Pero al márgen de todo se encuentra una gran decisión: si esperar a que otro invente, emprenda y crezca -para conseguirnos un buen trabajo- o ser de los personajes que dejan huella. Como dijo el sabio, la solución está en nuestras manos. Y en nuestras mentes.
Ramiro Henriquez