Para que sirve tanta tecnología ?

Cada cierto tiempo, reflexionamos sobre los adelantos tecnológicos y su importancia para la vida, ya fueren negocios, viajes, lo cultural, social o político, a la luz de la sicología de los pueblos. Pensamos en el bien que nos traen y los dolores de cabeza que a veces causan aunque mas temprano que tarde terminamos aceptándolos como mal necesario.

Empero, si miramos con lupa fina, encontramos que la tecnología responde al mismo desarrollo de las sociedades, al deseo de todos y cada uno de nosotros por querer hacer algo mejor, conseguir resultados mas ágilmente, crear procesos mas limpios, buscar un tiempo libre resultante de una eficiencia -a su vez producida por un producto novedoso-; vender mas unidades a precio mas bajo; trabajar menos y disponer de mas días de descanso; transportarnos en medios mas veloces, disponer de secretarias digitales que "hagan" el trabajo rutinario; reencontrarnos con el "don de la ubicuidad" ( internet ) y en suma, realizar en todo momento mas con menos, en menor tiempo; mas simplemente.

Mundo perfecto? quien sabe.

Si nos detenemos en lo anotado, percibimos que abarca las distintas ventanas que maneja una sociedad, la que no en vano llamamos ahora " la sociedad del conocimiento" pues si no conoces el ambiente tecnológico de lo que te rodea estás fuera del circulo y corres peligro de convertirte en desadaptado. Pero si te va demasiado bien con ello, también existe el albur de convertirte en un hombre raro.

La frase que escribió el futurólogo Alvin Tofler por allá en los años setenta viene como anillo al dedo para estas reflexiones. Tofler decía que los avisos clasificados del 2000 en adelante dirían: Se necesita vicepresidente; indispensable escribir a máquina".

Nuestros abuelos hubiesen considerado esto un insulto pero para los jóvenes del 2007 es todo un halago pues implica que ellos -nacidos con el computador, internet, los videojuegos, estos blogs, chat, celular y el mundo inalambrico- están disponibles para el mercado laboral pues despiertan, comen y duermen abrazados, nó a la sábana sino a la tecnología.

La conclusión es simple y rápida: la tecnología llegó para quedarse, abarcando todas y cada una de las aristas de cualquier conglomerado. No se dá aquello de trabajar para la tecnología sino con tecnología. La diferencia es grande.

De modo que sirve y mucho; y lo peor, no podemos prescindir de ella aunque quisiéramos. Ni siquiera en la isla perdida de Robinson Crusoe ya que si por esas cosas del destino nos tocase pernoctar allá, que ojalá fuere con celular y laptop inalámbrico. Solo así podríamos sobrevivir a las fieras de la selva y al terror de estar a merced de las fuerzas de la naturaleza.

Ramiro Henriquez
Miami Florida